Un novato en tu cocina: Tarta de queso con confitura de arándano

Nos volvemos a atrever con un postre, y uno al que teníamos muchas ganas, tarta de queso con confitura de arándano. Tardaremos alrededor de 1 hora (depende la maña de cada uno), pero es muy sencilla de realizar y merece la pena probar. Necesitaremos un paquete de galleta maría, unos 40 gr de mantequilla, 1 queso de untar, 1 de nata de cocinar, 1 sobre de gelatina (10 gr), azúcar y 1 bote de confitura o mermelada de arándanos.

Comenzamos troceando el paquete de galletas, tan pequeño como podamos. Luego usaremos la batidora para triturar bien, pero cuanto más pequeños hagamos los trozos, mejor. Mientras, derretimos la mantequilla en el micro.

Como hemos comenzado, trituramos con la batidora las galletas, y juntamos con la mantequilla ya fundida, mezclando bien para que coja la base una buena consistencia.

Con la "pasta" de galleta y mantequilla, rellenamos el molde, intentando hacer una masa lo más "plana" posible, distribuyéndola por todo el molde.

Metemos en el frigorífico, y nos ponemos con la segunda parte de la tarta. Ponemos a hervir la nata de cocinar con el azucar (unos 40 gr aprox). Si vemos que puede ser insuficiente, podemos añadir algo de leche. Cuando esté hirviendo, le añadimos el queso de untar, y damos vueltas, hasta que se funda y desaparezca.

Sacamos del fuego y dejamos que pierda calor. Cuando esté más templado, añadimos la mitad del sobre de gelatina, y mezclamos bien. Posteriormente, y cuando ya esté frío, añadimos al molde, esparciéndolo de forma similar.

Volvemos a introducir en el frigorífico y comenzamos con la tercera parte de la tarta. Ponemos a hervir con un poquito de agua todo el bote de confitura o mermelada de arándano, sin dejar de remover.

Dejamos enviar un poco, y luego añadimos la gelatina, removiéndolo. Cuando ya esté completamente frio, y la capa de queso sea lo suficientemente compacta, añadimos la confitura al molde, y dejamos en la nevera hasta el momento de servir el postre.