Variante de la tortilla de patatas, le echamos un acompañante, en este caso, espinacas. Dependiendo del tamaño, usaremos más o menos patatas, pero, de media, necesitaremos unas 3 patatas, cebolla (como siempre, al gusto), 4 o 5 huevos (dependerá del tamaño de las patatas, y si nos gusta más o menos esponjosa la tortilla), espinacas, aceite y sal.
Lavamos y pelamos las patatas, y volvemos a lavarlas (por si acaso). Las cortamos en rodajas (o como prefieras). Cogemos la cebolla, la pelamos y cortamos al gusto (yo en cachos pequeños, que no a todos les gusta "notar" la cebolla). Ponemos abundante aceite en una sartén y añadimos las patatas y la cebolla a la vez, dejándolas en el fuego unos 10 o 15 minutos. Vamos removiendo de vez en cuando y aplastándolas suavemente.
Las espinacas las pondremos al fuego, para que se hagan un poco (en caso de ser congeladas, descongelamos a fuego lento).
Mientras tanto, batimos los huevos en un bol y añadimos sal (al gusto). Cuando estén listas las patatas y la cebolla, quitamos el aceite de la sartén, dejando únicamente un poquito para hacer la tortilla, y echamos los huevos a la sartén. Movemos la sartén y metemos un tenedor (o lo que tengamos) entre la sartén y la "tortilla", para evitar que se nos pegue. Es ahora cuando añadiremos las espinacas.
Cuando veamos que la tortilla va cogiendo forma, con un plato o una tapa plana, tapamos la sartén y le damos la vuelta. Si todo ha ido bien, tendremos nuestra media tortilla en el plato. Volvemos a poner la sartén al fuego y, con cuidado, ponemos la tortilla en la sartén por el lado sin hacer.
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